Hay cosas que definitivamente no pensaba vivir y dentro de ellas una que ni me cruzaba por la cabeza era una Pandemia a estos niveles.…esto ha generado muchos cambios extraordinarios en la forma que hacemos las cosas, cómo pensamos e inclusive hasta cómo sentimos. La situación comenzó bastante confusa, veíamos lo que estaba sucediendo en otros países como si era improbable que llegara a nosotros…y en lo que nuestro país reaccionó, cada uno buscaba cómo organizarse en esta situación de la cual teníamos poco entendimiento y un exceso extraordinario de información (reales y no reales) en las redes sociales y todos los medios de comunicación.
Esta es una época compleja por los miedos que genera, cada día vemos los casos de personas contagiadas incrementar….igual que quienes mueren y la lentitud de los que se van recuperando…es un virus que no discrimina y sumamente invasivo sobre todo para personas con condiciones previas de salud. Da bastante miedo y encima los niveles de ansiedad suben…preocupación por familiares, amigos, compañeros de trabajo…preocupación por tener las provisiones necesarias en la casa de comida, medicinas, agua… preocupación por el futuro, por los ahorros que se reducen…no es fácil…encima de que salir de la casa se ha convertido en un ¨deporte extremo¨ en donde hay que andar forrados y con mascarillas (que no sé ustedes pero yo siento que voy ahogándome), guantes y lentes…. y donde desinfectar las compras y todo lo que entra a la casa es una especie de castigo…. por eso y otras cosas más… mantenerse positivos y esperanzados en esta situación no es tan sencillo.
Como sucedió con muchos, me tocó trabajar desde mi casa…una experiencia que he encontrado bastante agradable por cierto…mi Nido es mi zona de confort (y ahora de seguridad), además de que siempre he disfrutado enormemente estar en mi casa…muy raras veces me aburro, siempre tengo mil cosas qué hacer y de hecho a veces aún me falta tiempo en el día para actividades varias…. pues realmente mi horario de oficina se mantiene tal cual (en ocasiones por un par de horas más de lo normal), a todo se agrega la limpieza de la casa…y mi agenda incluye hasta correr en mi sala (creo es lo único que he extrañado, correr al aire libre y en un espacio sin límites).
Esta es una historia de la que aún no sabemos el final, pero en lo que llega tenemos que hacer muchas previsiones y ser extremadamente cuidadosos y prudentes. Quedarnos en la casa (por más que extrañemos movernos con libertad) es lo único que realmente podemos hacer para evitar contagiarnos o contagiar. Quisiera dar consejos de cómo llevar esta situación de mejor manera, pero creo que cada quien debe buscar la fórmula que mejor le funcione según sus condiciones y necesidades. Mientras vivimos por primera vez un mal común… espero recobremos la ¨humanidad¨ y podamos hacer una transición suave a lo que es ¨el nuevo ahora¨. Buenas vibras para todos!
Desde mi punto de vista... 